sábado, 29 de noviembre de 2014

Querida Denna:

Querida Denna:

Siento un dolor que me desgarra el pecho, me anuda la garganta y me mantiene en una angustia constante. Quisiera huir de mí mismo, pero hasta en sueños soy incapaz de sacarte de mi mente.

Estoy atrapado en un desierto, muerto de sed y hambre, sed de verte y escucharte, y mi mente me pasa una mala jugada y me pone delante la comida constantemente, pero es tan solo un espejismo.

Habían llegado a mis oídos tantos relatos acerca del amor… Tonterías, pensaba yo, pues nunca había tenido el gusto de conocerlo en primera persona hasta que llegaste tú, mi preciosa Denna, y me miraste con esos ojos que bien podrían compararse a un par de zafiros azules, o al mismísimo hielo, ya que me recorre un escalofrío cada vez que te veo. Tienes esa manera de mirarme que llega a lugares dentro de mí que no sabía que existían. Amor, lo llaman.

Gusto de conocerlo, o condena, podría decir, pues de sobra sé que es un amor imposible, un amor que sólo habrá existido en el suspiro de un soñador.
Me siento como un lobo enamorado de la luna que aúlla por su amor imposible, incapaz de alcanzarlo, y te aseguro que es un paisaje aterrador.
Tuve el deseo de acabar al fin con este dolor y arrojarme al abismo, al mar de tus ojos, pero el miedo se apoderó de mí.

No soy más que un cobarde.

No puedo decirte más que todo aquello a lo que en mi vida hoy, mi amor, aspiro. Que algún día seas mía, me despido…

2 comentarios:

  1. Que bonita carta, me ha gustado el sentimiento que le pones al escribir ;)
    Me gusto cuando dices: "Me siento como un lobo enamorado de la luna que aúlla por su amor imposible, incapaz de alcanzarlo, y te aseguro que es paisaje aterrador" *o*

    Besos~

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchísimas gracias de corazón, Hanna 💜.
      ¡Un besazo!

      Eliminar